Por Ana Malvina Santillán*
El conflicto entre palestinos e israelíes es uno de los más largos y sangrientos. Según los analistas, sin precedentes. El mundo mira con asombro las imágenes televisivas donde los misiles en la noche, cuasi película yanqui, explotan, volviendo fascinante lo que se ve, a la vez que espeluznante.
Asombran como los acuerdos de guerra quedaron hechos trizas en el conflicto entre Israel y Palestina. Se han asesinado familias durmiendo, niños a punta de pistola, esta mañana han bombardeado un hospital con el 40% de niños hospitalizados. Respirar hondo es inútil ante una América que no logra dimensionar los conflictos de estos países árabes, y la opinión pública se divide en los que están de un lado o del otro o peor, los que aún no saben de qué lado estar.
El estallido de la guerra en Israel provocó una rápida respuesta por parte de los gobiernos Latinoamericanos, donde la gran mayoría expresó, en un principio, su rechazo en contra del bombardeo, los secuestros y ataques a la población civil propiciada por Hamás. Posteriormente, una respuesta igual de violenta por parte de Tel Aviv, produjo el rechazo de esos mismos líderes. Entonces ¿de qué lado ponerse? ¿Quiénes son los violentos y quiénes los violentados? ¿Se puede estar de alguno de los dos bandos?
Mientras que Chile “manifestó su absoluta condena” haciendo un llamado al cese “de esta violencia inconducente”, y rechazó los ataques de Hamás, Uruguay deploró “con la mayor firmeza las acciones terroristas en curso contra Israel y su población”. Argentina condenó “las acciones terroristas de Hamas contra territorio israelí”, el gobierno brasileño también se pronunció y rechazó el hecho, Lula da Silva, a través de sus redes sociales afirmó que brindará el apoyo necesario para Israel en medio del conflicto. Estas noticias del diario SEMANA del 8 de octubre, sin embargo, contrastan con las de unos días después en otro medio. El diario Reforma de México ofreció, hace dos días, una clasificación de las posiciones actuales de los líderes latinos. En la categoría de quienes apoyan a Hamas puso, a Venezuela, claramente habría que agregar a Cuba y Nicaragua (aunque en rigor hasta ahora ninguno de esos gobiernos ha apoyado expresamente a Hamas, sino a la causa palestina). Entre los gobiernos neutrales incluyó a México, Brasil, y Bolivia, mientras que del lado de Israel incluyó a Argentina, Chile, Paraguay, Perú y Uruguay. (CNN, 16.10.23)2
Retomando las imágenes que en los últimos días nos muestran los noticieros nos preguntamos ¿es la violencia la única forma de triunfar? Hannah Arendt, sostiene que es eminentemente una relación de dominación y violencia que se ha impuesto a través de la historia porque, el ser humano no ejerció el poder del modo que hubiese querido. Ya que la violencia es inferior al poder, que el poder nunca puede surgir de la violencia y que esta ayuda a destruir el poder, pero nunca a crearlo, porque la violencia tiene el dominio absoluto en ausencia del poder. Por eso concluye diciendo que la pérdida del poder se convierte en una tentación para reemplazarlo por la violencia (Arendt, 1973, 156)3. Suponemos entonces que, estas naciones que se disputan territorio, poder y dominación han perdido el poder reemplazándolo por la violencia, una que aterra.
El poder no es individual, sino que ha requerido de cierto consenso, al menos de un grupo de hombres que sostienen el aparato político, con acciones concertadas, logrando que el poder pueda permanecer con ellos, dicen Arendt (1973). Al estar de un lado o del otro, estos líderes políticos ofrecen consenso y ceden poder, dependiendo a quién apoyan, o defienden. Pocos jefes de estado son los que repudian los enfrentamientos desde las dos partes, se habla de víctimas de un lado o del otro, olvidando que hay muertos y destrucción en los dos bandos y que al final de cuentas la política, que debía utilizarse para unir a los más diversos, termina siendo su propia destrucción.
“Tengo un sueño, un solo sueño, seguir soñando. Soñar con la libertad, soñar con la justicia, soñar con la igualdad y ojalá ya no tuviera necesidad de soñarlas”.
Martin Luther King
Ref https:
1 //www.redalyc.org/journal/6363/636369216010/
2 https://cnnespanol.cnn.com/2023/10/16/opinion-america-latina-onflicto-israel-hamas/
3 http://ve.scielo.org/scielo.php?script=sci_arttext&pid=S1315-95182005000100012
*Colaboración para En Provincia – Alumna de la Cátedra Liderazgos Políticos en América Latina – Facultad de Periodismo y Comunicación Social – UNLP.
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