Panorama mundial en el contexto de los casos de coronavirus

La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, y su marido, el empresario Paul Pelosi, debieron abandonar la celebración de una misa en la Iglesia de San Patricio, en Roma, debido a un “incidente de seguridad”, informó el rector de la iglesia, Steven Petroff.

El hecho sucedió anoche, cerca de la iglesia y en el centro de Roma, donde cientos de personas se enfrentaron a la policía y causaron graves daños a la sede de la CGIL, la principal confederación sindical del país.

Unos 10.000 manifestantes, entre miembros del grupúsculo de ultraderecha, Forza Nuova, protestaron contra el pasaporte sanitario que permite el ingreso a lugares públicos a personas vacunadas contra el coronavirus o testeadas recientemente.

“Probablemente escuchaste o viste el alboroto; desafortunadamente, supongo, hubo un incidente de seguridad y lamentablemente la presidenta Pelosi y su esposo tuvieron que irse”, explicó Petroff, en un vídeo publicado en redes sociales.

“Iba a hacer nuestra segunda lectura hoy, pero por supuesto que su seguridad es lo más importante”, agregó, citado por la agencia de noticias Europa Press y manifestó su inquietud por las manifestaciones contra el pasaporte de coronavirus.

En tanto, una periodista de la agencia de noticias católica CAN, Joan Lewis, negó que Pelosi fuese abucheada, como habían informado algunos medios de comunicación.

“Fue el destacamento de seguridad de Pelosi la que la hizo salir de misa por su propia seguridad”, detalló.

Pelosi viajó a Roma el viernes para dar el discurso de apertura en la sesión inaugural de la Cumbre de Presidentes de Parlamentos del G20, y el sábado se reunió con el papa Francisco y otros altos funcionarios del Vaticano.