El Concejo Deliberante de la ciudad La Plata conmemoró al estudiante de periodismo, Miguel Bru, que fue torturado por policías y luego desaparecido. Ese hecho ocurrió hace 29 años. Su cuerpo nunca fue hallado, por el que familiares y amigos realizarán el próximo 17 de agosto una vigilia frente a la comisaría platense donde fue visto por última vez.
“No me alcanza la vida para agradecerle a Dios que le eligió los pasos a Miguel a esa querida Escuela de Periodismo, donde tiene los amigos y amigas que tiene hoy que son aquellos y aquellas que empezaron esta lucha que nos enseñaron”, dijo Rosa Schonfeld de Bru (foto de tapa), madre del joven y añadió: “A pocos días de los 29 años seguimos preguntándonos dónde está Miguel”.
La mujer afirmó que “su padre partió sin que ninguno de sus compañeros policías le dijeran dónde está su hijo”.
“Fue el servicio de calle de la comisaría novena la responsable de la desaparición de Miguel, también su comisario Juan Domingo Ojeda, que era responsable de esa comisaría y tampoco hizo nada para que nosotros sepamos dónde está”, recordó Rosa.
La madre de Miguel invitó a todas y todos a acompañarlos “el 17 de agosto próximo a la comisaría” ya que desde el año 1999 adelante la vigilia, lo cual fue una “promesa” que le hicieron a su hijo.
“Es el último lugar que lo vieron con vida y es ahí en donde vamos a estar hasta que sepamos dónde está”, concluyó.
En tanto, la concejala del Frente de Todos, Ana Negrete, destacó que el aprendizaje “durante todos esos años a decir ‘no a la violencia institucional'”, y que cada vez que suceda “repudiar el hecho”.
La edil resaltó el compromiso de la Asociación Miguel Bru, que asesora a víctimas de la violencia institucional y a Rosa, madre del estudiante asesinado, presente en la sesión.
Miguel Bru (23) desapareció hace 29 años luego de denunciar a efectivos de la comisaría novena de La Plata por un allanamiento ilegal en su casa y comenzar a ser amenazado y hostigado para que retirara esa acusación.
Según se acreditó en juicio, el joven fue secuestrado cerca de la localidad de Bavio, en el partido de La Plata, el 17 de agosto de 1993 y las declaraciones de varios detenidos y las pericias en el libro de guardia permitieron comprobar que fue ingresado en esa seccional entre las 19 y las 20, donde fue visto por última vez mientras era torturado.
En 1999, en un juicio oral y público, fueron condenados a prisión perpetua al exsubcomisario Walter Abrigo, quien murió en la cárcel; y el sargento Justo López, por el homicidio y desaparición; mientras que por encubrimiento fueron sentenciados el excomisario Domingo Ojeda y el exoficial Ramón Ceressetto.
