Un pulpo llamado Otto provocó un corte de energía en un acuario al trepar al borde de su tanque y disparar un chorro de agua, a una luz brillante, que luego de que había sido colocada, lo molestaba.
El personal creía que al pulpo llamado Otto le había molestado la luz brillante que deslumbraba en su acuario.
Las personas descubrieron que Otto podía apagarla trepando al borde de su tanque y lanzando desde allí un chorro de agua en su dirección.
En principio el cortocircuito había desconcertado a los electricistas y al personal del Sea Star Aquarium de Coburg, Alemania, que decidieron hacer turnos para dormir en el suelo, para descubrir qué causaba los misteriosos apagones.
Datos de interés
Lo mejor de todo no es sólo esto. Lo que realmente sucede es que en invierno, cuando el acuario está cerrado y por ende no hay visitantes, el genial Otto, se aburre un poco. Así que mediante la observación, se lo ha visto: Haciendo malabares con unos cangrejos. Revoleando piedras hacia las paredes de vidrio (dañándolas). Reordenando todos los elementos que se encuentran en la pecera.
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