Arquitecta Carina Ikasovic –
Cuatro de la tarde, comienzo mi recorrido diario desde el Norte de la Ciudad de Mar del Plata con destino al centro, voy disfrutando de la hermosa vista que me ofrece el mar: brillante! Imponente!, hasta que de pronto a mi derecha y sobresaliendo de las demás edificaciones ¡aparece Èl!
¡Hermoso y cautivante! Es el espacio saturnino Unzué ubicado en las dos manzanas comprendidas entre las calles Rio Negro, SantaCruz, Jujuy y 20 de septiembre.
Declarado en 1997 Monumento Histórico Nacional! Hoy en reconstrucción y puesta en valor desde el año 2007.
Es una creación del Arquitecto francés Louis Faure Dujerarric, formado en la Ëcole de Beaux Arts de París, entre sus famosas y destacadas obras distribuidas entre América y Europa, se encentra la Estación y Retiro de Ferrocarril de Belgrano, el estadio de Tenis de Roland Garros y el Estadio Olímpico de Colombes.
¿Cuál fue el origen del bello edificio?
Fue un encargo de las hermanas María Unzué de Alvear y Concepción Natalia Unzué de Casares, perteneciente a familiar de la alta aristocracia porteña y dueñas de la chacra 328 de la Ciudad de Mar del Plata donde hoy está implantado el edificio.
Su finalidad fue construir un “Asilo sanatorio para niñas huérfanas” y un “Oratorio” con “nobles materiales”, llamando al lugar “Asilo Saturnino Unzué”, en honor a su padre.
Arquitectura y estilo del Asilo Unzué
El edificio del Arquitecto Dujarric presenta una planta en forma de H con pabellones en dos plantas, con un gran parque en su interior, está inspirado en el movimiento de la Secesión Vienesa reinterpretando estilos pasados ante del impetuoso ataque de la Revolución Industrial hacia las artes y la Sociedad.
El interior estuvo a cargo de los talleres de CurzioCaponetti, en Roma, donde se realizaron los solados, revestimientos de muro, fustes, columnas, capiteles, bases, orfebrería, herrajes y carpintera, traídos en barco hasta Buenos Aires.
El Oratorio de la Inmaculada Concepción se halla en el centro del edificio, está revestido en mármol y con estilo Neobizantino. Este estilo usado de edificios públicos y religiosos integra la arquitectura bizantina con la cristiano medieval, usando arcadas, cúpulas, ladrillos, estuco y mosaicos en la decoración.
Todo el edificio desde el basamento hasta la cúpula está inspirado en la ciencia exacta de los números sagrados, el número 8 en este caso, número que se repite en los planos, en los detalles decorativos con la exactitud de su oculto significado.
Todo está ordenado de acuerdo a intenciones místicos religiosas, tal vez difíciles de descifrar.
¿Cuándo se construyó el Asilo Unzué?
Las obras comienzan a principios de 1909, un año después que las hermanas Unzué anunciaran al papá de la Iglesia Católica Pio X la construcción del Asilo y del Oratorio informando que la administración y atención de las niñas estaría a cargo de las Hermanas Franciscana de María.
En 1945 el Asilo pasó a depender de la Fundación Evita y luego pasó a distintos organismos oficiales cambiando el nombre de “Asilo” por el de “Hogar”.
Actualmente depende de la Secretaria de la Niñez, Adolescencia y familia, bajo la supervisión del Ministro de Desarrollo Social de la Nación.
Hoy llamado Espacio Unzué de Mar del Plata ofrece actividades recreativas para toda la familia desde juegos para niños, payasos y ferias artesanales usándose el único pabellón restaurado en sus dos niveles y el patio.
El oratorio completamente reconstruido puede visitarse en algunas ocasiones como visitas guiadas, este fue declarado Monumento Histórico Nacional el 15 de agosto de 1985 por su gran valor arquitectónico y ornamental.
El “Asilo Saturnino Unzué” es uno de los monumentos más tradicionales y queridos de la Ciudad, desde lejos se puede descubrir su imponente silueta y su campanario con su cruz.
¿Pero qué hay de historias ocultas y secretos sus misteriosos tras sus muros?
Muchas, ¡algunas ciertas tal vez! ¡Otras creadas para hacerlo más atractivo!
Se dice que por el Asilo pasaron muchas hijas de la aristocracia porteña y que vivían allí durante sus embarazos cuando estos no eran deseados. Luego de que nacieran los bebes, estos vivían en el Asilo como huérfanos para cuidar así el buen nombre de las familias.
Por otro lado se dice que el Asilo Unzué tiene una red de túneles o en algunos casos un túnel y pasadizos secretos, conectando uno de ellos con la cripta de la capilla de Santa Cecilia a mil cien metros de allí, o de ser un solo túnel con la vivienda del capellán ubicada en las cercanías del edificio. Es cierto que el Unzué tiene dependencias subterráneas como talleres, salas de máquinas, donde aún quedan elementos desde su fundación, ¡pero que existen túneles secretos!
También se hablan de infaltables sonidos nocturnos como una caja musical y el llanto de un bebe.
Se cuenta que en 1927 un capellán sedujo una monja otros dicen que no la sedujo, sino que la violó, otros que no fue una monja sino una pupila y otras que no fue un capellán sino uno de los choferes. La mujer quedó embarazada y recluida en los túneles del Unzué para ocultar el escándalo, este seria los orígenes de los sonidos nocturnos.
¡Cuánta imaginación! Jóvenes, hoy mujeres mayores que vivieron en el Asilo comentan que ocurrieron hechos paranormales, camas que se movían solas, pasos fantasmales a media noche y puertas que se abrirían y cerraban mágicamente.
Mucha de estas historias no han podido probarse certeramente, pero si es cierto que le otorgan a nuestro edificio una halo de misterio y magia, digno de una gran imaginación popular, que sin dañar la imagen del Asilo Unzué lo vuelven más atractivo a los ojos de curiosos sin perder su grandioso valor arquitectónico a lo largo del tiempo
Hoy, embestido por el mar, la sal, los temporales, los vientos marinos y los “cuentos misteriosos”, el Asilo Unzué sigue de pie, firme, ¡imponente, victorioso!
¡El jamás se rendirá!
Las fotografías que ilustran la presente columna son producción de Caro Genga