Con el escritor rumano Mircea Cartarescu, el japonés Haruki Murakami y la francesa Annie Ernaux a la cabeza de las apuestas, que año tras año suelen ser tan convocantes como desacertados, la Academia sueca se dispone a anunciar el jueves al ganador del Premio Nobel de Literatura, que los pronósticos hacen recaer sobre un autor o autora con acento en la producción novelística luego del triunfo de la poeta estadounidense Louise Glück en 2020.
Antesala infaltable de todas las ediciones, la danza de nombres está en su punto máximo de ebullición, abonando un juego al que se prestan críticos y lectores sin importar que el veredicto desacredite luego este ejercicio lúdico con la elección de un ganador desconocido para una mayoría o ajeno al ecosistema literario, como ocurrió en 2016 con la elección del músico y compositor Bob Dylan.
El escritor rumano Mircea Cartarescu es uno de los principales favoritos junto a su colega japonés Haruki Murakami -histórico candidato al galardón- , junto con la rusa Ludmila Ulitskaya, la francesa Annie Ernaux, el húngaro Peter Nadas, el francés Michel Houellebecq, las canadienses Anne Carson y Margaret Atwood, y las estadounidenses Joyce Carol Oates y Joan Didion.
En esta edición, luego de casi una década de galardonados exclusivamente occidentales, se espera que los integrantes del jurado cumplan el próximo jueves con su promesa de más diversidad, porque excepto el británico, Kazuo Ishiguro, que nació en Japón y obtuvo el Nobel en 2017, los laureados de los últimos nueve años fueron europeos o norteamericanos.
Los grandes países occidentales acumulan varios ganadores, encabezados por Francia con 15, pero los dos países más poblados del mundo, India y China, tienen uno cada uno –sin incluir a Gao Xingjian, nacido en China pero nacionalizado francés.
Para hacer justicia a esta demanda, circulan como candidatos el surcoreano Ko Un, el keniano Ngugi wa Thiong’o, la nigeriana Chimamanda Ngozi Adichie y el chino Can Xue, además del indio Vikram Seth, el mozambiqueño de habla portuguesa Mia Couto y el opositor chino Liao Yiwu.
Por otro lado, suenan también opciones conciliadoras con el signo de los tiempos: así, en línea con los cuestionamientos al poscolonialismo, las apuestas mencionan entre los favoritos a la escritora caribeña estadounidense Jamaïca Kincaid y a la francesa de la isla de Guadalupe Maryse Condé.