Los Oscars tendrán museo propio: avanza un templo dedicado al cine

Por Mercedes Ezquiaga para la agencia de noticias Télam.

El Museo de la Academia, un templo dedicado a la magia de las películas de todos los tiempos, se prepara para abrir sus puertas en la ciudad de Los Ángeles el próximo 30 de septiembre.

El Museo de la Academia, un templo dedicado a la magia de las películas de todos los tiempos, se prepara para abrir sus puertas en la ciudad de Los Ángeles el próximo 30 de septiembre en un edificio de seis pisos, con objetos icónicos de recordados filmes y exposiciones inaugurales a cargo de Pedro Almodóvar, Spike Lee y Hayao Miyazaki.

Los zapatitos rojos de Dorothy (Judy Garland) en “El Mago de Oz”, el vestido que utilizó Salma Hayek para interpretar a Frida Kahlo (en el film “Frida”), las puertas originales del café de “Casablanca” o el trineo de “El ciudadano” (de Orson Welles) son solo algunas de las piezas que estarán en exhibición de manera permanente, además de las exposiciones temporarias, en este complejo de 27.000 metros cuadrados.

“Nuestro museo será icónico en el mundo, con colaboraciones muy fructíferas. Tenemos un futuro muy lindo por delante. Es emocionante poder trabajar con tantos genios. Va a ser un espacio mágico, en Los Ángeles, para el mundo”, dijo a Télam el mexicano Raúl Guzmán, del equipo curatorial de lo que será la principal institución del mundo dedicada al arte y la ciencia del cine, en la esquina de Wilshire Boulevard y Fairfax Avenue, con vista -desde la terraza- a las colinas de Hollywood.

Guzmán trabajó como director artístico de NBC Universal, fue director adjunto de Cinema Tropical y organizó ciclos de cine junto con el Guggenheim y el Museo del Barrio, entre otros.

La experiencia del Academy Museum of Motion Pictures comenzará en el Gran Lobby del Edificio Saban, en la sala de la familia Spielberg, que estará abierta al público de forma gratuita y rodeará a los visitantes con múltiples pantallas que ofrecerán una rápida de la historia del cine, desde los hermanos Lumière a la actualidad. Allí mismo se podrá apreciar el objeto más grande de toda la colección: el único modelo de tiburón que sobrevivió al paso del tiempo, de 500 kilos y siete metros de largo, hecho en fibra de vidrio, que se utilizó en el clásico de 1975 de Steven Spielberg, y que el cineasta bautizó como “Bruce, the shark”, en homenaje a su abogado.

En el tercer piso, los visitantes se encontrarán con los originales de “E.T. el extraterrestre”, los entrañables R2-D2 y C-3PO de la saga “Star Wars” junto a modelos, maquetas, disfraces y animaciones utilizadas en Blancanieves y Bugs Bunny, entre otras figuras de la cinematografía animada.