El Museo Nacional de Bellas Artes presentará, desde el jueves 25 de marzo, la exposición “El canon accidental. Mujeres artistas en Argentina (1890-1950)”, con curaduría de la investigadora Georgina Gluzman.
La muestra reunirá más de 80 obras realizadas por 44 artistas, con la intención de cuestionar los relatos establecidos en la historia del arte en nuestro país y recuperar la figura de estas creadoras, muchas de ellas ignoradas o desconocidas.
“Consideradas raras, locas, excéntricas o, cuando mucho, mujeres ociosas entregadas a un mero pasatiempo, las artistas argentinas generalmente han padecido el ocultamiento y la invisibilización no solo de sus contemporáneos, sino de la propia historia del arte”, afirma el director del Museo, Andrés Duprat.
“El momento actual exige la reflexión, la toma de conciencia y la problematización del rol de la mujer en la historia del arte argentino. Desde el Bellas Artes, proponemos en este sentido un espacio de interrogación permanente acerca de la articulación entre arte y sociedad, que, en el caso de esta muestra, dirige su atención al momento de la constitución de la mirada femenina en la producción artística local”, agrega.
Apunta a cuestionar los relatos establecidos en la historia del arte en nuestro país y recuperar la figura de estas creadoras, muchas de ellas ignoradas o desconocidas.
Con obras del acervo del Bellas Artes, museos provinciales y municipales y colecciones particulares, esta muestra –inédita en la historia del Museo– permitirá apreciar pinturas, dibujos, grabados, fotografías y esculturas de artistas que, en algunos casos, serán exhibidas por primera vez.
“La exposición incluye, por un lado, trabajos de artistas con presencia en los márgenes de la historia del arte y, por otro lado, piezas de artistas hoy prácticamente desconocidas, pero cuya actividad les valió la admiración de sus contemporáneos”, explica Gluzman.
“Todas ellas pasaron de estar en el centro de la actividad artística a ser, en el mejor de los casos, meras notas al pie de los relatos de la historia del arte”, agrega la curadora.
La muestra “El canon accidental” se organiza en tres núcleos: el primero, “En el centro de los géneros” presentará una serie de retratos, desnudos y naturalezas muertas creadas desde fines del siglo XIX por María Obligado, Eugenia Belin Sarmiento, Julia Wernicke, Ana Weiss, Hortensia Berdier y Sofía Posadas, entre otras.
El segundo núcleo, “En el centro de la consagración”, refiere a los cambios suscitados a partir de 1911, año de realización del primer Salón Nacional, y en las dos décadas posteriores.
Fue entonces cuando un conjunto de mujeres –como Lía Correa Morales, Emilia Bertolé, Léonie Matthis, Paulina Blinder, Leonor Terry y María Washington– alcanzó un nivel de visibilidad y un reconocimiento inusitados.
El tercer núcleo, “En el centro de nuevas direcciones” da cuenta de la historia de las artistas a partir de la década de 1930, cuando comenzaron a abordar la representación femenina en desnudos renovadores y en retratos modernos que contribuyeron a la formulación visual de la mujer nueva.
Este conjunto incluirá piezas de Raquel Forner, Mariette Lydis, Annemarie Heinrich, Consuelo González, Cecilia Marcovich, Laura Mulhall Girondo, Carlota Stein y Gertrudis Chale, entre otras.
Respecto del título de la exposición, la curadora analiza que, en la historia del arte, el canon no es el resultado natural de la evaluación de la calidad.
Por el contrario, “es un producto de decisiones ancladas en una concepción patriarcal de la cultura que excluye sistemáticamente a las mujeres creadoras. El canon no es indiscutible: es político, cambiante y hasta caprichoso. En suma, es accidental”.