El desprendimiento del gigantesco témpano, cuyo proceso se inició en el 2019 y ahora terminó, fue detectado por especialistas del Instituto Antártico Argentino mediante imágenes del satélite argentino Saocom 1A.
Un témpano de 1.270 kilómetros cuadrados se desprendió de una barrera de hielo al sur del mar de Wedell, en la Antártida, por lo que se monitoreará su posición para apoyar y planificar la próxima campaña antártica de verano, informó la Secretaría de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur.
El desprendimiento del gigantesco témpano, cuyo proceso se inició en el 2019 y terminó ayer, fue detectado por especialistas del Instituto Antártico Argentino mediante imágenes del satélite argentino Saocom 1A, detalló la secretaría.
El témpano se desprendió de la barrera de hielo Brunt, que esta formada “por una masa de hielo en flotación, que es la continuación en el océano de glaciares que provienen del continente, en este caso de la Antártida”, explicó la secretaría.
El organismo destacó que esta barrera, “aún tiene otras grietas importantes que han aparecido en los últimos años y que provocarán otros desprendimientos de témpanos en el futuro, por lo que el monitoreo no termina con el desprendimiento de este témpano”
“Mientras no sufra la acción de los océanos y se encuentre en zonas de mar a muy baja temperatura, el témpano puede permanecer sin derretirse por muchos años”, indicó la secretaría y agregó que es importante analizar estos procesos de desprendimientos de grandes témpanos “para mejorar el conocimiento de la dinámica de las barreras de hielo antárticas”.
En la zona “sólo algunas embarcaciones navegan esta región tan austral y remota; la campaña logística y científica argentina ya ha accedido a esta zona durante los últimos días de enero pasado y no lo volverá a hacer hasta el próximo verano”, acotó.