Arquitecta Carina Ikasovic –
La ciudad de Mar del Plata del mediados del siglo XX estaba poblada de bellas, majestuosas y aristocráticas viviendas de diversos estilos: normandos, pintoresquista ingleses, tudor, Art Nubeau, etc. Pero una de estas construcciones se destaca del resto por ser el único edificio, exótico si lo hay, de estilo mudéjar, una fusión de arquitectura española con musulmana.
Estoy hablando del Palacio Árabe, así conocido por la gente, ubicado en la esquina de San Martin y Córdoba (plena Peatonal San Martin).
Pero ¿A quién se le ocurrió construir este enigmático edificio? ¿Cuándo lo hizo? ¿Por qué?
Quien construyo este único e enigmático edificio fue Jallil Mahamed Hasseim o Julián Galli como fue anotado aquí en Argentina, luego de escapar de Siria a finales del siglo XIX por ser adolescente y no querer enrolarse en el ejército. Fue sacado por su padre para huir de Imperio Otomano.
La familia primero viajo a España donde permaneció cinco años, es allí donde Jallil quedo impactado por la arquitectura mudéjar.
Luego de cinco años el grupo partiría hacia Nueva York donde tenían familiares, pero por equivocación en el embarque llegaron a la Argentina.
El primer destino de Jallil en el país fue Tandil donde salía en carreta a vender relojes. Luego fue a vivir a Sierras de los Padres y finalmente llego a Mar del Plata en 1910.
Fue un gran emprendedor de negocios, se fijaba que cosas podía obtener de forma gratuita para generar ganancias.
“Vio que las playas estaban llenas de caracoles entonces invento las cajas decoradas con la descripción recuerdo de Mar del Plata que primero escribiría su madre y más tarde su esposa”.
A las cajas de caracoles le sumo otro rubro: la biyouterie fina. Su primer local Karime estuvo en unas de las ramblas de madera, epicentro de la aristocracia veraneante.
Jallil prosperò en varios negocios económicamente, instalò su comercio en San Martin y Entre Ríos y luego se lanzó a la aventura de construir un edificio que le recordaran el arte mudéjar.
En la esquina de San Martin y Córdoba había una confitería y un hotel. Jallil la venía observando hace ya tiempo desde que era vigilante del lugar, el veía que esta zona iba a ser el eje central de la Ciudad.
La propiedad salió a remate y Jallil ganò la compulsa. Pagar las cuotas y levantar el edificio fueron proezas de su propio genio empresarial.
¿Y cómo es el edificio?
El Palacio Árabe es un edificio de cinco pisos y locales en planta baja. Comenzó a construirse en 1945 y finalizo entre 1948 y 1949.
En la puerta del edificio sobre Córdoba 1681, el Centro Libanés y la Colectividad Árabe, que alguna vez funcionaron allí. Colocaron una placa en homenaje al inspirador artífice de este legado que es la máxima expresión de la arquitectura árabe.
En esta obra produce podemos ver arcos moriscos de herradura, signos e ideogramas arábigos como filigranas y la medialuna musulmana. Cuenta con gran cantidad de elementos decorativos de la arquitectura árabe clásico.
En el balcón que recorre todo el primer piso se destacan las inscripciones en caracteres arábigos que dicen “Alá es grande”.
El mármol oscuro de los revestimientos de planta baja contrasta con los revoques claros motivos decorativos y molduras ornamentales del resto de la fachada esmaltados y pisos decorados.
El lugar es una joya arquitectónica única en Mar del Plata ciudad con una fuerte impronta constructiva con edificios de distintos estilos que nos caracterizan, nos dan identidad, dignos de ser recorridos, disfrutados y respetados por nosotros, los ciudadanos de esta Ciudad porque son nuestros edificios, referentes, nuestra historia y nuestra identidad.