
La vacuna contra el coronavirus de la empresa estadounidense Moderna, desarrollada con una tecnología innovadora, demostró una eficacia del 94,1%, presentó buenos resultados en población adolescente y generó títulos neutralizantes contra las nuevas variantes del virus en las personas inmunizadas.
Se trata de una de las dos vacunas aprobadas con tecnología de ARN mensajero junto a la de Pfizer, se administra en dos dosis y según indicó la la Organización Mundial de la Salud (OMS) puede conservarse a una temperatura de entre 2 °C y 8 °C durante 30 días.
A diferencia de Pfizer aunque “los viales multidosis incluidos en los envases contienen una suspensión que se debe conservar a una temperatura comprendida entre –25 ºC y –15 ºC, se pueden mantener refrigerados a una temperatura de entre 2 °C y 8 °C durante 30 días”, indicó la OMS.
El estudio clínico de fase 3 de la vacuna de Moderna fue publicado el 30 de diciembre de 2020 en la revista New England Journal of Medicine, y allí se informó la eficacia del 94,1% contra la Covid-19 sintomática en base al ensayo en el que participaron más de 30 mil voluntarios.
El trabajo también señaló que “aparte de las reacciones transitorias locales y sistémicas, no se identificaron problemas de seguridad”.
El 25 de mayo pasado, Moderna anunció que su vacuna contra el coronavirus es “altamente efectiva” en adolescentes de entre 12 y 17 años, según los resultados completos del ensayo clínico TeenCOVE.
En ese estudio participaron más de 3.700 adolescentes de entre 12 y 17 años en Estados Unidos, de los cuales dos tercios recibieron la vacuna y un tercio placebo.
“Tras dos dosis, ningún caso de Covid-19 se observó en el grupo vacunado (…) contra cuatro casos en el grupo placebo, lo que resulta en una efectividad de la vacuna de 100% 14 días después de la segunda dosis”, sostuvo Moderna en su comunicado.
La empresa también inició un estudio en 6.750 niños de 6 meses a 11 años (KidCOVE) cuyos resultados todavía no presentó.