Por Abogada Liliana Pizarro Martinefsky * alimotxe54@gmail.com
San Millán de la Cogolla es un pequeño municipio español ubicado en la comunidad autónoma de La Rioja. Sobre la margen izquierda del río Cárdenas se asientan el Monasterio de Suso y el de Yuso, reconocidos por su valor histórico, patrimonial y literario.
El Monasterio de Yuso, se construyó en el año 1053 por el rey García Sánchez III de Navarra “el de Nájera”. Es fruto de una actividad arquitectónica esparcida a lo largo de los siglos y que denota la confluencia de estilos como el renacentista y barroco sin llegar a contraponerse. En sus enormes dimensiones descansan abundantes obras artísticas, cuadros, lienzos y cofres del siglo XVII.
El recinto monástico cuenta con una biblioteca y archivo de gran valor cultural. Allí surgieron los códices como el Emilianense de los Concilios (992); la Biblia de Quiso (664), o una copia del Apocalipsis, de Beato de Liébana con la letra del siglo VIII.
El códice Emilianense fue elaborado en pergamino y escrito en letra visigótica pausada. No es una única pieza con un hilo conductor sino que se trata de un volumen que contiene textos variados y agrupados en cuadernillos. Su apariencia rudimentaria y aspecto descuidado ratifican su antiguo origen y gran valor literario, ya que en él se encuentra el primer testimonio expresado en glosas del habla en romance, que en su evolución nos lleva a la actual lengua castellana. Las glosas son anotaciones, interlineadas o marginales y en este códice existen más de mil anotaciones en latín, romance y vasco (euskera), escritas con la intención principal de resolver las dificultades de comprensión sintáctica, morfológica y léxica de ese texto latino. En la actualidad se lo puede ver en la Real Academia Española de la Historia, ubicada en la ciudad de Madrid.
Los rígidos muros de piedra fueron testigos de las primeras poesías en lengua española escritas por Gonzalo de Berceo, residente habitual del Monasterio. Berceo inauguró la senda de la poesía erudita, en contraposición con la desarrollada por la poesía épica popular y la de los juglares.
Códice Emilianense
Más de 10.000 ejemplares descansan en estos monasterios religiosos, convirtiéndose en una ruta turística para los amantes de los libros medievales que se ven atraídos por este enclave riojano considerado como la cuna de la lengua española.
Por razones históricas, artísticas, religiosas, lingüísticas y literarias, ambos Monasterios fueron declarados como Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO el 4 de diciembre de 1997.
*Colaboración Especial desde España para En Provincia
