Personas privadas de libertad de una cárcel bonaerense de General Alvear elaboraron un “Bipedestador” que donaron a la Escuela de Educación Especial N° 502 “Celia Ausili de Biurrum” de la localidad de Norberto Riesta.
La experiencia solidaria se desarrolló en la Unidad 30 del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) en el marco del programa “Más trabajo, menos reincidencia” que impulsa el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la provincia de Buenos Aires, a cargo de Julio Alak.
El bipedestador es un equipamiento adaptado que se utiliza para conseguir la posición vertical del niño/a cuando el control motor es inadecuado, es decir, cuando el niño o la niña no es capaz de sostener y controlar su cuerpo de forma activa en contra de la gravedad y tiene edad para hacerlo.
Marcela Dinuncio trabaja en la Unidad 30 y ha sido el nexo entre la institución penitenciaria y la educativa. Ella fue la que recibió el Bipedestador y lo entregó a los niños con capacidades especiales.
Dinuncio se mostró muy agradecida y conmovida por el trabajo de los internos: “Existe una gran variedad de bipedestadores, y la mayoría representan un alto costo económico, por eso esta donación significa mucho para la institución escolar. A la gran mayoría de los niños/as les gusta estar de pie. Esta es una posición que muchos de ellos no han podido experimentar hasta el momento, por eso es de vital importancia este equipamiento. Cada niño que lo use tendrá sensaciones agradables en su cuerpo, ya que no han de realizar un esfuerzo excesivo para mantenerse de pie y de esta forma pueden dedicar parte de su energía a explorar el entorno desde una perspectiva diferente”.
El bipedestador fue fabricado por un grupo de internos que tuvieron la iniciativa de juntar los materiales y dentro del área de Formación Técnica y Oficios, perteneciente a la Dirección de Promoción e Inclusión Sociolaboral y la Subdirección General de Trabajo del SPB, lograron terminar un equipamiento muy útil para la escuela especial de la localidad vecina.
El Director de la Unidad 30, José María Alonso, junto al Subdirector de Asistencia y Tratamiento, José Osvaldo Torres, el Jefe de Vigilancia y Tratamiento, Luciano Salvareschi, el Coordinador de Formación Técnica y Oficios, Renzo Pender y el Jefe de Talleres, Sebastián Fernández, llevaron el bipedestador hasta la escuela especial de Norberto de la Riestra para entregarlo a su directora Luján Menay, allí conocieron a la comunidad educativa y se comprometieron con futuros proyectos entre las instituciones.
La directora del establecimiento educativo agradeció con profunda emoción esta donación y explicó la importancia de este equipamiento: “Normalmente se programa la bipedestación frente a una mesa donde se puedan realizar actividades pedagógicas y/o, ayudándole a organizar su control óculo-manual mientras mantiene un correcto alineamiento músculo-esquelético”.
“Además -continuó-, gracias al bipedestador, los niños pueden mantenerse en la misma posición que el resto de sus compañeros, amigos o hermanos, ya sea en un ámbito escolar o familiar, por lo que se trabajan también las áreas socializadoras y de relación con sus iguales, es realmente importantísimo para nosotros”.
Fotografías: Prensa Servicio Penitenciario.