Brasil, donde se extiende casi el 62% de la selva tropical, es el principal responsable por los altos índices de deforestación, con 425.051 km2 desmatados en esas casi dos décadas.
El Amazonas perdió más de 500.000 km2, equivalente al 8% de su territorio por la deforestación entre 2000 y 2018, según un estudio de la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (Raisg) difundido este martes.
Según el estudio “Amazonía bajo presión”, realizado por la red regional de investigadores y organizaciones de la sociedad civil, se comprobó la tala de 513.016 km2 de la mayor selva tropical del mundo compartida por Brasil, Colombia, Perú, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Surinam, Guyana y Guayana Francesa.
“La Amazonía está mucho más amenazada que hace ocho años” debido al “avance de las actividades de extracción, de los proyectos de infraestructura, así como de los incendios, la deforestación y la pérdida de carbono”, señaló la Raisg en un comunicado consignado por la agencia de noticias AFP.
“Aunque 2003 sigue siendo el peor año para la selva amazónica desde 2000, con una pérdida de 49.240 km2, la deforestación se ha acelerado desde 2012” y “el área perdida anualmente se triplicó entre 2015 y 2018. Sólo en 2018, 31.269 km2 fueron deforestados en toda la Amazonía”, aseguró el reporte.