
Lorena Pronsky, graduada de la Licenciatura en Psicología de la Facultad de Humanidades de la Universidad Católica de La Plata (UCALP), ha construido una carrera profesional y literaria que combina su pasión por la psicología con su talento como escritora. Con seis libros publicados y un séptimo en camino, se ha convertido en una voz reconocida en el mundo editorial, tanto en Argentina como en el extranjero. Su trayectoria es un reflejo de su compromiso con los valores que aprendió y cultivó durante sus años en la Universidad Católica de La Plata.
Lorena recuerda su paso por la UCALP como uno de los periodos más significativos de su vida. “Fueron cinco años donde siempre tuve la meta clara: ser psicóloga. Eso me mantuvo muy activa, con muchas ganas y motivación”, relata. Destaca el ambiente familiar y afectivo de la Facultad, donde el diálogo constante con profesores y autoridades le permitió sentirse acompañada y valorada. “Había un aire de contención y un ida y vuelta permanente. Sentí que la carrera me acompañó y que siempre estuvo alineada con lo que quería estudiar”, afirma.
Entre los profesores que marcaron su formación, menciona a Rubén Bernasconi, de Psicopatología, y a Hernán Bruno, de Psicología I, con quienes aún mantiene un vínculo cercano. “Ellos me motivaron con su forma apasionada de enseñar y su exigencia, lo cual me ayudó a comprometerme aún más con mi carrera”, explica.
Sobre cómo influyó en su formación, la licenciada en Psicología explicó que “siempre fue una carrera donde no nos estuvo vedado el afecto, yo pude aprender y concurrir a las materias con un acercamiento hacia los profesores que me permitió entender que para atender y para ver a un paciente, lo podía hacer de manera integral sin miedo al afecto, sin miedo a esta idea falsa o esta falacia de tener que dejar eso de lado para poder atender a otro”.
Primera experiencia laboral: acompañamiento y compromiso
Tras graduarse Lorena comentó: “Más allá de la parte clínica, me gustaba el acompañamiento, la asistencia y, durante la carrera, hice un curso de acompañante terapéutico. Me gustaba mucho el tema de las adicciones, pero también la psicooncología y me presenté en el Centro Oncológico de Excelencia (COE) que tenía a Luis Mainetti como director. Con mi título recién en mano, le dije que quería aprender y trabajar. Él me abrió las puertas y así empecé a acompañar a pacientes y familiares en un momento sumamente difícil”, recuerda.
“El afecto es un puente necesario para poder ejercer esta profesión”.
Su trabajo en el COE fue el inicio de una carrera marcada por el compromiso afectivo. “Aprendí a poner el cuerpo, a no tener miedo al afecto en la relación con los pacientes. Eso me permitió generar vínculos profundos y ofrecer un espacio de contención y apoyo”, señala. Más tarde, incursionó en el campo de las adicciones, trabajando en Sedronar y en el Astillero Río Santiago, donde actualmente está a cargo del área de salud mental.
“Así fui haciendo mi trabajo como psicóloga”, valora Pronsky. “Me fui moviendo con mucha seguridad. Y en cuanto a la formación, esa seguridad la fui adquiriendo en el trato, en el acompañamiento, contención y valoración permanente que hacían los profesionales, los profesores y los directivos de la Facultad. La experiencia que dejó mi trabajo con los pacientes con problemáticas en el consumo, con pacientes oncológicos o con los familiares es que hay que poner el cuerpo, que no se puede trabajar atendiendo las necesidades afectivas de un paciente en proceso de angustia o duelo, o pretendiendo no involucrarse efectivamente, a no tenerle miedo al afecto en la relación paciente-psicólogo”.
La escritura: un puente entre la psicología y las emociones humanas
La literatura llegó a la vida de Lorena de manera natural. “Siempre me gustó escribir, pero nunca lo hice con la expectativa de publicar. Simplemente quería contar historias”, explica. Su primer libro, Rota, fue el inicio de una carrera literaria que la llevó a publicar seis obras, todas best sellers, bajo el sello de Penguin Random House. Entre ellas se destacan: Rota se camina igual, Cúrame, Despierta, No amarás, y Flores en el barro.
Su último libro, Loca, aborda la depresión y la distimia (depresión más leve, pero de larga duración) desde una perspectiva íntima y vivencial. “Quería que la gente entendiera lo que es un cuadro de depresión en carne propia, cómo piensa y siente una persona que lo padece, que entiendan cómo se viste, cómo piensa, qué pensamientos tiene, qué perspectiva del mundo tiene, qué pasa con la voluntad de esa persona, qué pasa a nivel físico y sintomático, qué pasa con la medicación, y todo eso quería explicarlo narrando una historia”, comenta.
La novela ha tenido un impacto significativo, no solo entre psicólogos, sino también entre lectores que se han sentido identificados con la historia de Carola, la protagonista, en la que la escritora buscó hacer un aporte distinto, un llamado de atención a esta nueva modalidad, de la “happycracia”, de la felicidad como la que nos debería comandar”.
Una voz diferente en un mundo de soluciones rápidas
Lorena se distingue por su enfoque honesto y alejado de las fórmulas mágicas de la autoayuda. “No escribo para dar tips de felicidad. La vida es compleja y dolorosa, y creo que es importante hablar de eso sin negar la realidad”, afirma. Critica la “industria de la felicidad” y su tendencia a responsabilizar al individuo por su bienestar, ignorando, por ejemplo, las circunstancias sociales y económicas que lo rodean.
“La felicidad no es una decisión individual. Somos seres sociales y necesitamos del otro para existir. Negar eso es empobrecer nuestra comprensión de la vida. Sabemos que la vida es difícil, cada vez más difícil y a veces la manera de estar bien es volviendo al origen, a lo simple”, sostiene.
Su literatura invita a reflexionar sobre las emociones humanas más profundas y a encontrar consuelo en la autenticidad. Con una carrera consolidada tanto en la psicología como en la literatura, Lorena Pronsky sigue adelante con proyectos nuevos. Actualmente, está trabajando en su séptimo libro, una historia que promete seguir explorando las complejidades del ser humano.
Su trayectoria es un testimonio de cómo la formación académica, el compromiso afectivo y la autenticidad pueden converger para crear un impacto profundo, tanto en la vida de los pacientes como en la de los lectores. Lorena Pronsky no solo es una psicóloga y escritora destacada, sino también una voz necesaria en un mundo que a menudo busca respuestas rápidas en lugar de profundizar en las verdades más cercanas y humanas.
Fotografías: Prensa UCALP – https://www.ucalp.edu.ar/